Filosofos, problema filosófico

La conciencia como problema filosófico

La conciencia abordada como un problema filosófico

 

Si eres igual de curioso/a que yo, de seguro que al leer el título anterior te hayan surgido tres inquietudes principales:

 

  • ¿Qué es un problema filosófico?

  • ¿Qué es la conciencia?

  • ¿Qué tiene que ver la conciencia con la filosofía?

 

Pues bien, en relación a la primera, un problema filosófico no es más que aquellas grandes interrogantes eternas que aquejan y perturban al ser humano, su mente, alma y espíritu; y de las cuales no hay hasta el momento respuesta totalmente satisfactoria. Precisamente, la conciencia constituye el punto de partida de muchas de esas interrogantes y es por ello que la filosofía la aborda como tal.

 

Dicho esto, pasemos entonces a nuestra segunda pregunta de arranque: ¿Y qué es la conciencia?

 

Hay que decir que justo aquí empieza el primer problema respecto a ella, dado que al no tener un correlato físico, se torna bastante difícil precisar su significado. Aun así, podemos decir que el término tiene su origen en el vocablo latino “conscientia” que significa literalmente “con conocimiento”. Aquí quizás te estés preguntando, ¿Con conocimiento de qué? Déjame decirte querido lector que, ¡Con conocimiento de todo! La conciencia es ese acto psíquico mediante el cual una persona se percibe a sí misma en el mundo.

 

También ella se refiere a la capacidad que nos indica lo que está bien y lo que está mal, es decir, la facultad humana para decidir acciones y hacerse responsable de las consecuencias de acuerdo a la concepción del bien y del mal. No obstante, por ahora solo nos concierne la primera acepción, y por ello nos quedaremos con esta, pues justamente ella nos lleva a nuestra tercera y más importante pregunta:

 

¿Qué rayos tiene que ver la conciencia con la filosofía?

 

Déjame decirte que ¡Tiene que verlo todo! Puesto que, como dijimos, en esta ocasión la conciencia se refiere al saber que existimos y naturalmente, ¡Todos los problemas del hombre empezaron cuando este adquirió conciencia! Es decir, cuando supo que existía.

 

Fue entonces cuando empezó a plantearse las interrogantes que conocemos hoy en día: ¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿Para donde voy? Porque, lógicamente si no está consciente de que existe ni se identifica como miembro del mundo, no puede realizarse ninguna de ellas. Así que, en pocas palabras, el punto de partida de la filosofía, es sin duda alguna, la conciencia.

 

En ese mismo orden, conviene hacerse una última pregunta: ¿Quién fue primero, el ser o la conciencia?

 

Para responderla, lo primero que se debe aclarar es qué es el ser y, dependiendo de la concepción que tengamos de él, pues de allí derivará la respuesta a nuestra pregunta. Platón, por ejemplo, sostenía que el “ser” eran las ideas y, si partimos de esta afirmación, evidentemente diremos que primero es la conciencia.

 

Pero, si dejamos a un lado a Platón, en términos generales “ser” es todo aquello que posee un alma, un ser es un individuo, una criatura o una entidad. En el aspecto más filosófico, “ser” es lo que llamamos la esencia o la naturaleza de algo.

 

Entonces, considero que la respuesta sería un tanto subjetiva, particularmente considero que primero es el ser y luego la conciencia, debido a que la conciencia solo le es propia al hombre, o sea, la ecuación básica sería: Ser – mente = conciencia.

 

Pero, repito: es mi percepción. Así que, dejo a cada lector abierto a sus propias conclusiones.

 

¿Qué piensas tú? ¿Primero fue el ser o la conciencia?

Publicado en Ensayos.

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